Guerrero es una de las entidades del país que tienen más y mejores riquezas naturales y culturales. Eso es patente en sus tradiciones, costumbres, parajes naturales y delicias gastronómicas. No es de extrañar, entonces, que los viajeros tengan un inagotable caudal de maravillas turísticas por descubrir en Guerrero y las famosas playas de Acapulco. Vale la pena compartirles algunos curiosos datos acerca de esta formidable entidad mexicana.
“Guerrero” tiene ese nombre como un homenaje a Vicente Guerrero, héroe de la Independencia. Estamos ante un espacio geográfico habitado por cuatro importantes etnias: tlapanecos, amuzgos, nahuas y mixtecos. Tres son los principales destinos turísticos guerrerenses: Taxco, Ixtapa-Zihuatanejo y Acapulco, los cuales integran el corredor turístico del Triángulo del Sol.
Taxco es un lugar de gran interés. Es uno de los Pueblos Mágicos más exitosos del país por el interés que despierta en los visitantes tanto nacionales como extranjeros. El nombre que tiene esta población guerrerense deriva del náhuatl y quiere decir “en el juego de pelota”.
No solo destaca por su amplia producción de productos artesanales de plata, sino también por su excelente gastronomía. Una de las delicias de la cocina de Taxco es la bebida llamada “Berta”, la cual se prepara mezclando tequila con miel y limón.
Por lo que se refiere al destino turístico más tradicional de Guerrero, el puerto de Acapulco, tiene como principal referencia geográfica la Bahía de Santa Lucía. Es un lugar rodeado de elevadas montañas, algunas de las cuales pueden medir hasta 900 metros. La extensión territorial de Acapulco es de 4,827 metros de este a oeste.
Dos referentes turísticos de la entidad guerrerense son el Fuerte de San Diego y La Quebrada. Este último sitio era conocido antiguamente como Abra de San Nicolás, mientras que el primero tuvo que ser reconstruido entre los años de 1778 y 1784, tras haber sido dañado por un terremoto en 1776.
Acapulco comenzó a recibir vuelos turísticos en 1929 y el servicio telefónico inició operaciones en esta ciudad costera desde 1936. Uno de los hoteles más antiguos de Acapulco es el Mirador, localizado en el área de La Quebrada, ya que abrió sus puertas en 1933. Por lo que se refiere al Malecón fue construido entre los años de 1936 y 1943.
Un lugar que ninguna familia con niños se debe perder es el Parque Papagayo, uno de los más tradicionales, no solo de Acapulco, sino de todo el estado de Guerrero. Localizado también en la Avenida Costera, comprende una gran extensión y cuenta con una vasta gama de diversiones, como por ejemplo, pistas de patinaje, espacios para go karts, y varias cosas más. El Parque Papagayo es especialmente disfrutable para los niños más pequeños.
Por último, el puerto de Acapulco, destaca por los varios centros comerciales con los que cuenta. Modernos, dinámicos y sofisticados, por los muchos productos que allí se comercializan, resultan por demás atrayentes para los pequeños. Además, estos sitios cuentan también con áreas de juegos infantiles o de videojuegos, en donde los pequeños y los adolescentes pueden disfrutar de horas de entretenimiento. Acapulco es uno de los mejores sitios para vacacionar, en especial por estas opciones de esparcimiento infantil, con las que cuenta.
Espectacular, trepidante y con sentido aventurero, destaca el rafting o descenso en ríos. Es una de las mejores y más accesibles actividades del turismo de aventura y en Acapulco se puede practicar en un entorno paradisiaco. Por otra parte, el descenso en ríos nos permite observar distintas especies de animales y plantas. En Acapulco, el sitio más adecuado para el rafting, es el río Papagayo, definido por sus rápidos y corrientes, que pueden llegar a ser de clase II.
Es tiempo de comentar acerca del kayak, otra de las diversiones extremas, que hay disponibles en Acapulco. También tiene como escenario el intenso caudal del río Papagayo. Navegar en kayak en Acapulco demanda de los practicantes una gran pericia y mucho valor. Se distingue del rafting en que el kayak depende enteramente del talento navegador de una sola persona.
Las tradiciones culinarias de Acapulco, son exquisitas e incluyen una gran variedad de platillos, perfectos para ser disfrutados en los excelentes bares y restaurantes de la Avenida Costera, o en las palapas de las muchas bellas playas que se encuentran en este mágico lugar. De entre lo más consumido por los visitantes y lugareños de Acapulco, destacan el ceviche y el pozole, los cuales se preparan de distintas maneras y con diferentes ingredientes.
También imperdibles son los pulpos en su tinta, camarones al mojo de ajo, a la campechana, o combinados con almeja, cayo de hacha y jaiba. En el marco de unas vacaciones en Acapulco, tampoco hay que perderse la sopa de mársicos y de pescado, la barbacoa de chivo y bebidas como el chilate, la tuba, el tepache, y aguas preparadas con las frutas que crecen en estos costeños lares. En general, la cocina de Acapulco es muy sabrosa y es uno de los motivos por los cuales es un disfrute viajar a este magnífico destino turístico mexicano.
El golf en Acapulco es una de las actividades más disfrutables, primero que nada, por el ambiente paradisiaco que ofrece. Basta con observar los numerosos tours que se ofrecen para conocer Acapulco, en donde se incluye el golf como una opción recreativa. Preciosos campos de 18 hoyos, con nivel profesional, están al alcance del público vacacionista en este puerto guerrerense. Quienes practican el deporte que les comentamos en este destino turístico del Pacífico Mexicano, además de gozar de las emociones del juego, pueden contemplar hermosos paisajes y disfrutar de servicios exclusivos en las instalaciones de estos campos de golf.
No hay nada mejor para los vacacionistas, que descansar y distraerse en un hermoso campo de golf, perfectamente podado, con 18 hoyos y en un ambiente de brisa marina y espectaculares vistas. Acapulco cuenta con los mejores campos de golf de esta zona del pacífico y por ello, es uno de los destinos predilectos de los jugadores de golf profesionales y amateurs.
En total, Acapulco tiene cuatro grandes campos de golf, los cuales se ubican en lujosos hoteles y áreas residenciales de enorme prestigio, como es el caso del hotel Fairmont Acapulco Princess, el Fairmont Pierre Marqués y el Tres Vidas.