Vamos a ofrecerles algunas referencias históricas y comerciales acerca de dos de los principales puertos veracruzanos. Se trata de datos que enriquecerán nuestras futuras visitas a esta entidad de la República Mexicana.
El Puerto de Veracruz ha sido el escenario de muchos acontecimientos determinantes en la historia de nuestro país.
Allí arribó Hernán Cortés en el siglo XVI, para comenzar la Conquista de México; en los tiempos de la Nueva España, el puerto de Veracruz fue un sitio clave para el comercio y la comunicación con otras regiones del orbe, además de destacar por su privilegiada ubicación geográfica.
En el año de 1864 este puerto mexicano fue a donde arribaron Maximiliano de Habsburgo y su consorte Carlota para emprender el Segundo Imperio. Décadas más tarde, en 1900, en este sitio estalló una gran huelga, que fue precursora de la Revolución Mexicana.
Poco más de diez años más tarde, el derrotado presidente Porfirio Díaz abandonaría México por el puerto de Veracruz, tras ser depuesto por las fuerzas revolucionarias. Finalmente, hay que mencionar que se le conoce como tres veces heroico al Puerto de Veracruz, por el valor y la entrega con la cual se defendió allí la soberanía nacional en las invasiones de Estados Unidos de 1847 y de 1914, así como también la intervención francesa de 1862.
El Puerto de Veracruz, tiene una extensión mayor a las 600 hectáreas y cuenta con 19 zonas de atraque, en nueve muelles con terminales de contenedores, usos variados, coches, etc.
También cuenta con un muelle para cruceros y otro para el atraque de embarcaciones petroleras. Las mercancías que se traslada desde el Puerto de Veracruz es para consumo interno y para exportaciones dirigidas a la Florida, Europa y parte del continente africano.
Por lo que se refiere al Puerto de Coatzacoalcos, también cuenta con una ubicación muy ventajosa, en la zona del Istmo de Tehuantepec, la vía más breve entre el Océano Pacífico y el Golfo de México, con tan solo 302 km de separación. Es manejado especialmente por la industria petrolera y agroindustrial. Allí se ingresan y parten del territorio mexicano, graneles minerales, fertilizantes, azufre, productos químicos y melaza.
Veracruz por supuesto, es un estado con bonitas playas, en donde se pueden pasar unas vacaciones deliciosas. Pero como hemos visto, visitar este estado en sus zonas costeras, tiene otros focos de interés, como es el caso de conocer estos famosos puertos y su famoso acuario, justo como comentaremos ahora.
Una espectacular pecera oceánica es el centro del acuario, ésta permite a los visitantes observar a vista de buzo diversas especies marinas como tiburones gata, meros, barracudas y otros coloridos peces que habitan el sistema de arrecifes veracruzano.
La tecnología empleada en la construcción del acuario es similar a la de otros grandes acuarios del mundo, lo que permite una vista panorámica a través de enormes ventanas de acrílico tanto en la pecera arrecifal como en el túnel.
La proximidad de los peces que cruzan por arriba o al lado del túnel crea la sensación en los visitantes de estar sumergido en el mar sin necesidad de un equipo de buceo.
El acuario cuenta con varias galerías donde se exhiben peces de agua salada y dulce y otras especies que sobresalen por sus características, como las medusas, la morena verde y las langostas espinosas.
Los peces de agua dulce son más pequeños pero no menos atractivos, se tienen especies locales y de regiones como el Amazonas y otros lugares del mundo; incluyendo, la única exhibición de peces ciegos originarios de cuevas localizadas en San Luis Potosí.
El acuario también se encarga de la conservación del manatí del Caribe, tarea en la que ha logrado con éxito la reproducción en cautiverio de esta especie. Los visitantes tienen la oportunidad de ver a través de la pecera y en la superficie algunos de estos mamíferos.
El delfinario y el tiburonario son dos atractivos más del acuario, ambos espacios ofrecen vistas “submarinas” a los visitantes y están diseñados bajo las normas para el mantenimiento de especies en cautiverio.
No menos imperdible es el Carnaval de Veracruz, uno de los más importantes de México. Desde su primera entrega, en 1925, el carnaval de Veracruz se ha constituido como la celebración de este tipo más relevante de nuestro país. Y lo anterior ha sido el resultado del mucho folclor, los bailes, las máscaras y los concursos de danzón y otros ritmos populares que se incluyen en los festejos de este esperado acontecimiento. De entre las dinámicas tradicionales más representativas del carnaval de Veracruz se deben mencionar, la “Quema del mal humor”, en donde la gente quema, entre vistosos fuegos pirotécnicos, la figura en cartón de alguna controvertida personalidad de la opinión pública; la “Coronación”, el tributo que rinde el público a quienes reconocen como los reyes del evento, y el “Entierro de Juan Carnaval”, pintoresca representación con la que finalizan los festejos del carnaval.
Ahora bien, si viajas a Veracruz con el propósito de tomar el sol y encontrar descanso en un ambiente grato y natural, entonces las playas de Veracruz son estupendas opciones. Te sugerimos gozar de playas como Villa del Mar, Playón de Hornos, Mocambo y Costa de Oro. Además, para quien aunado a lo anterior guste de los deportes acuáticos y en especial del buceo y el esnórquel, conviene recordar que muy cerca del Puerto de Veracruz se localiza una de las maravillas submarinas más atractivas de explorar: el Sistema Arrecifal Veracruzano. Este último es el hogar de más de 4,000 especies de peces y cerca de 700 especies de coral. Definitivamente es una gran alternativa para quienes gusten de conocer de cerca los ecosistemas que se desarrollan en los grandes arrecifes del planeta.
También aconsejable es Barra de Cazones, el cual se perfila como un relevante puerto pesquero. Allí destaca su noble faro y las playas cercanas, que son un atractivo para los turistas nacionales y extranjeros. Si te gusta la pesca deportiva y la práctica del esnórquel, entonces una visita a Barra de Cazones, en el marco de unas vacaciones en Veracruz, es algo obligado.