Es evidente que el turismo en un sector, como otros tantos otros, que se ha beneficiado de los avances tecnológicos. Si pensamos en la era de la digitalización, las aplicaciones de este entorno han sido innumerables. Pero también hay que tener en cuenta que este mercado está teniendo grandes interacciones con el ocio digital, que benefician a ambos, y han pasado, tal vez, más desapercibidas que las que ha tenido con el resto de tecnología en general. Veamos algunos casos que pueden ejemplificar estas sinergias.
Promoción en línea con redes y webs especializadas
Las redes sociales son uno de los casos más paradigmáticos del ocio digital y la forma por excelencia de comunicación de nuestros días. Hoy, el método de interactuación predilecto de muchas generaciones son las plataformas de mensajería, pero también otras modalidades más masivas, como Twitter, Facebook o los canales de YouTube, Twitch o TikTok. Conseguir visibilidad en la actualidad pasa por promocionarse en estas redes. Por supuesto, también en el turismo. Destinos, actividades, hostelería, cultura, etc, tienen como objetivo conectar con los potenciales clientes. Y no hay mejor forma de hacerlo que llegando a ellos mediante estas vías. Incluso los blogs, que hoy están pasando a un segundo plano, han tenido gran importancia para descubrir diversos destinos turísticos.
Capítulo aparte merecen las webs con reseñas. No sólo de las empresas que ofrecen servicios turísticos, sino también sobre los destinos en sí mismos y lo que podemos hacer en ellos. Además, organizar un viaje de ocio es una actividad lúdica en sí misma. Programar las actividades o las visitas, reservar hoteles o desplazamientos, así como otras tantas posibilidades se convierte en algo muy diferente del pasado gracias a la tecnología. En estos días es mucho más fácil sacar partido de la experiencia gracias a los avances digitales. Y para las regiones es más sencillo crear paquetes vacacionales que pueden ser beneficiosos para todas las partes implicadas.
Actividades que crean sinergias
Otro buen ejemplo sobre la sinergia entre turismo y ocio digital son los deportes electrónicos. Los eventos relacionados con eSports tienen una gran repercusión mundial a muchos niveles (audiencia, apuestas o publicidad, por poner algunos ejemplos) y propician desplazamientos a las sedes de estos campeonatos. México se está convirtiendo en un punto estratégico en la región y potencia, cada vez más, estas competencias en suelo nacional, con lo que ello implica a nivel de hostelería, marca nacional o desarrollo tecnológico, por citar algunas consecuencias positivas.
Las plataformas de streaming están siendo, por otra parte, otra fuente de promoción de diversos destinos turísticos. El acceso a películas y series es más cómodo hoy en día, con lo que las localizaciones de estos productos audiovisuales pasan a ser familiares (y deseables de visitar) para muchos usuarios. Precisamente, las playas de México han sido el escenario perfecto para muchas producciones nacionales e internacionales, lo cual ha redundado positivamente en las visitas. Pero este no es el único ejemplo. Pensamos, como paradigma, en la ciudad de New York y su reconocimiento internacional, siendo el epicentro de muchas tramas argumentales en las películas y series.
El avance tecnológico también colabora para potenciar todas estas variables. Las nuevas redes de datos móviles permiten subir a internet contenido mucho más gráfico de forma rápida y ágil, por lo que los usuarios pueden compartir, en tiempo real, mediantes redes sociales, sus experiencias del viaje que están llevando a cabo, con el consiguiente efecto en sus seguidores y amigos. Además, este es un tipo de material que cada vez sirve más como inspiración para diversas campañas publicitarias, ya que conecta mejor con un “target” amplio.
En definitiva, el ocio digital, que cada vez ocupa una parte más importante del tiempo y del interés de la sociedad, no tiene porqué ser un rival directo del turismo, especialmente con su potencialidad como aliado para crear un trabajo conjunto que puede beneficiar a ambos. Cada vez es más necesaria una formación y un nivel de creatividad que ayude a utilizar estos recursos, para que el turismo pueda aprovecharlos. Pero esta es una oportunidad que no hay que dejar escapar y que representa una ventaja competitiva para aquellos que sepan verla. No hay duda de que el ocio digital va a seguir creciendo y superándose en términos de visibilidad. Asociar el turismo con este escaparate internacional resulta imprescindible.
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