Ya sea por motivo del Día del Amor y de la Amistad, para festejar un aniversario de bodas, como un obsequio de cumpleaños o sencillamente para disfrutar de la compañía de nuestro ser querido en un ambiente hermoso y fascinante, una escapada de fin de semana a Tepoztlán es de lo mejor.
Tepoztlán es una comunidad del Estado de Morelos, y por sus muchos atractivos naturales y culturales, está considerado como uno de los famosos “Pueblos Mágicos”. Tales sitios son excelentes para desarrollar paseos de fin de semana, especialmente en pareja. Tepoztlán cautiva por sus leyendas, cultura, historia, ritmo de vida y posibilidades para la aventura. Por si fuera poco, tiene una localización estupenda a menos de una hora de la capital del país y a 15 minutos de la ciudad de Cuernavaca.
Para brindarle un obsequio inolvidable a nuestra pareja, nada como una escapada compartida a este mágico pueblo de Morelos. Es una ocasión perfecta para gozar del magnífico clima, naturaleza profusa, amabilidad de los lugareños, y por supuesto, masajes de primer nivel y baños de temazcal.
Por otra parte, Tepoztlán tiene una rica gastronomía y es excelente para adquirir variados souvenirs. Tepoztlán es una palabra náhuatl que quiere decir, “lugar de las piedras quebradas” y esto se refiere seguramente a las condiciones orográficas de la zona, la cual aparece en medio de una cordillera montañosa de distintas altitudes y por lo consiguiente, de climas que oscilan desde lo muy frío a lo caluroso.
De entre lo que las parejas pueden visitar en Tepoztlán durante un fin de semana, destaca el Museo y Centro de Documentación Histórica de Tepoztlán, el cual se encuentra instalado en el Ex Convento de la Natividad, edificado en 1555. Reconocido como Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO, y sede de distintas actividades de corte cultural, el Ex Convento de la Natividad es una delicia en términos de arquitectura. Las parejas pueden admirar su proyección plateresca, capillas posas y capilla abierta, entre otros elementos de gran valía.
Igual de interesante es el Museo de Arte Prehispánico Carlos Pellicer, localizado en la parte trasera de la parroquia de la Natividad. Cuenta con varias salas, en donde se exponen vestigios arqueológicos hallados en la región.
Así también, los enamorados que se decidan a pasar un fin de semana en Tepoztlán, tienen la opción de ascender por el Cerro de El Tepozteco, para visitar el templo prehispánico que se localiza en su cumbre, o bien, tomar baños de temazcal y otras terapias naturales en los magníficos hoteles y spas del lugar.
Tepoztlán es realmente un lugar encantador y uno de los Pueblos Mágicos más populares en México. Su ubicación cercana a la Ciudad de México y a Cuernavaca lo convierte en un destino ideal para escapadas de fin de semana, especialmente para parejas.
Una de las características más destacadas de Tepoztlán son sus atractivos naturales. La presencia del imponente cerro del Tepozteco, con su antiguo templo en la cima, ofrece una oportunidad para disfrutar de una caminata y tener una vista panorámica impresionante de la región. Además, los alrededores del pueblo están rodeados de hermosos paisajes montañosos, donde se puede practicar senderismo, realizar paseos en bicicleta o simplemente relajarse y disfrutar de la naturaleza.
La cultura y la historia también son elementos distintivos de Tepoztlán. El pueblo tiene una gran riqueza cultural, y se pueden visitar varios lugares de interés, como el exconvento dominico del siglo XVI, que ahora alberga el Museo Tepoztlán. En el centro del pueblo, encontrarás calles empedradas, tiendas de artesanías y un mercado donde puedes adquirir productos locales y tradicionales.
Las leyendas y tradiciones también juegan un papel importante en el encanto de Tepoztlán. La festividad del Tepozteco, que se celebra en honor al santo patrono del pueblo, es una ocasión especial llena de color, música y danzas tradicionales. Además, se dice que Tepoztlán tiene una energía especial y es considerado un lugar de encuentro para aquellos interesados en el esoterismo y la espiritualidad.
En cuanto a la gastronomía, Tepoztlán ofrece una amplia variedad de platillos típicos y restaurantes con comida tradicional mexicana.
No puedes dejar de probar la cecina de Yecapixtla, un platillo famoso de la región, así como los tamales, las gorditas y otros antojitos mexicanos.Este platillo es muy famoso en la región. Consiste en carne de cerdo marinada con sal y especias, posteriormente se seca al sol y se asa a la parrilla. Se suele servir con tortillas, guacamole y salsa.
Los tamales son una parte esencial de la gastronomía mexicana, y en Tepoztlán puedes encontrar una gran variedad de ellos. Los tamales de mole, de rajas con queso y de frijol son muy populares en la región.
También destaca la barbacoa. Este platillo consiste en carne de borrego o res que se cocina lentamente en un horno de tierra. La carne se sirve deshebrada y se acompaña con tortillas, cebolla, cilantro y diferentes salsas. Y qué decir de la sopa de hongos. Tepoztlán se encuentra rodeado de montañas y bosques, lo que lo convierte en un lugar perfecto para encontrar una gran variedad de hongos. La sopa de hongos es una especialidad local y se prepara con hongos frescos, caldo de pollo, hierbas y especias.
De la misma manera, destacan las chapulas y el atole como antojitos indispensables de saborear por los rumbos de Tepoztlán. Las chalupas son antojitos mexicanos que consisten en una tortilla de maíz frita y crujiente, cubierta con salsa, pollo deshebrado, crema, queso y cebolla. Son una delicia que no puedes dejar de probar. El atole es una bebida caliente tradicional mexicana que se prepara a base de masa de maíz, agua o leche, azúcar y diferentes sabores como chocolate, vainilla o fresa. Es perfecto para acompañar un desayuno o una cena en Tepoztlán.
En resumidas cuentas, Tepoztlán es un lugar mágico que combina naturaleza, cultura, historia y tradiciones. Su proximidad a la Ciudad de México y Cuernavaca lo convierte en un destino perfecto para escapadas de fin de semana, especialmente para parejas que buscan disfrutar de un ambiente romántico y relajante.