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La Ruta De Los Dioses

En un principio los dioses crearon al hombre y le dieron el maíz para vivir; luego trajeron nuevas costumbres y le dieron forma a una cultura que nos ha dejado por herencia hermosos templos y complejas tradiciones; ahora los dioses vienen a Oaxaca, Puebla y Veracruz a disfrutar las bellezas naturales y la riqueza pluricultural que se ha fraguado al paso de los siglos en esta región de México, ejerciendo una poderosa atracción sobre todo aquel que recorre sus caminos.

Viva la experiencia de conocer tres Estados de nuestra República que son el principio y fin de inolvidables aventuras, porque en ellos encontrará playas, montañas, fósiles, ríos, arqueología, valles y bellas ciudades, muchas ciudades con templos de piedra que guardan incontables secretos.

El Programa Ruta de los Dioses lo integran los estados de: Ciudad de México, Oaxaca, Puebla, Tlaxcala y Veracruz.

En el caso de la Ciudad de México, al ser la más grande del mundo, podría parecer abrumadora, sin embargo, no sucede así en lo absoluto: es un lugar con numerosos tesoros turísticos más que recomendables. Por ejemplo, el Centro Histórico, lleno de animación y vivacidad, surge a partir del Zócalo, la segunda plaza pública más grande del orbe. Allí se pueden visitas los vestigios aztecas del Templo Mayor, la noble estructura de la Catedral Metropolitana y los admirables murales de Diego Rivera en Palacio Nacional.

En los alrededores de la Ciudad de México, destacan varios lugares y actividades por realizar. En cuanto a esto último, es divertido y valioso adquirir joyería de plata en bellos diseños y precios convenientes, en la colonial Taxco, o bien, artesanías de talavera y de otros materiales, en la señorial Puebla. En el caso del norte del país, se pueden vivir emocionantes experiencias ecoturísticas en Barrancas del Cobre en Chihuahua, o avistando ballenas, en las vastas zonas marinas de Baja California.

Su extensión territorial comprende desde la Costa del Golfo de México hasta el Océano Pacífico y cuenta con atractivos ricos en cultura, naturaleza, gastronomía y tradiciones, lo que permite ofrecer circuitos y rutas turísticas en los segmentos de: sol y playa, cultura, negocios y alternativo. Su mercado de origen es prioritariamente nacional y se complementa con turismo de Estados Unidos y Europa.

En Veracruz descubra antiguos asentamientos totonacas de impresionante estructura urbana como El Tajín y Zempoala; conozca La Antigua, primer poblado español en tierra continental; sumérjase en la alegría del puerto de Veracruz y disfrute una amplia gama de posibilidades para la diversión y el descanso, combinando el presente con el pasado en la fortaleza de San Juan de Ulúa; en Xalapa comparta un encantador ambiente bohemio; finalmente tome el camino hacia las altas montañas para vivir la aventura.

En Puebla visite una hermosa ciudad indígena, Cholula, con su gran templo dedicado al Dios de la lluvia cubierto por los mismo indígenas que lo construyeron; luego penetre e una de las más bellas y ricas ciudades virreinales, Puebla de los Ángeles, todo un monumento arquitectónico y artístico que puede conocer a través del circuito turístico Angelópolis con 12 recorridos perfectamente organizados. En los alrededores de la ciudad diviértase en Africam Safari, practique el ecoturismo y visite conventos o templos ubicados en pintorescos pueblos.

Puebla es uno de los 32 estados de la República Mexicana que se distingue por su enorme proyección turística. Se ubica en el centro oriente del territorio nacional y para efectos de escaparse un fin de semana, es una de las mejores alternativas que pudieran tomarse. Limita al este con el territorio Veracruzano, al poniente con los estados de Morelos, Tlaxcala, México e Hidalgo. Y el éxito turístico de Puebla se da, aun considerando que esta entidad no tiene salida al mar y que su territorio es bastante accidentado y variable en sus características. La superficie de Puebla es de 34, 251 kilómetros cuadrados y el hogar de cinco millones de personas. La capital es una joya turística por la riqueza arquitectónica y artística con la que cuenta.

La ciudad de Tlaxcala es la capital de uno de los estados más pequeños de nuestro país. Pero no por esta circunstancia se debe pensar que basta una sola jornada, para descubrir sus muchos atractivos. Por el contrario, la rica cultura, los antecedentes históricos, los fascinantes paisajes silvestres y los vestigios arqueológicos que caracterizan a esta magnífica ciudad provincial, hacen que Tlaxcala precise de varios viajes y estancias, para acercarse un poco a su magia particular.

Uno tiene la oportunidad de conocer esta maravillosa ciudad en gratos recorridos a pie, o en un ameno paseo en tranvía, el cual era el medio de transporte más significativo para los habitantes de la región, en los inicios del siglo XIX. El tranvía nos permitirá explorar el Centro Histórico, así como también el Santuario y Basílica de la Virgen de Ocotlán.

En Oaxaca, explore las ciudades prehispánicas de Mitla y Monte Albán para encontrarse con las avanzadas civilizaciones que precedieron; admire la belleza del barroco mexicano en el Templo de Santo Domingo y otras construcciones virreinales; recorra la ciudad de Oaxaca donde se respira una tranquila atmósfera y se saborea una exquisita cocina tradicional; o bien, deslícese sobre las altas olas de la Costa del Pacífico.

Declarada como Ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad por parte de la UNESCO desde finales de los ochentas, la capital oaxaqueña cuenta con un sabor único como ninguna, puesto que, además de sus atracciones estéticas y arquitectónicas, en esta urbe colonial se combinan tradiciones de diferentes etnias y culturas que incrementan su valía, transformándola en una ciudad llena de colores y formas fascinantes. Estos son algunos de los mejores atractivos de la ciudad de Oaxaca.

Fundada en el siglo XV, la ciudad de Oaxaca ostenta una proyección urbana fuera de serie, con algunos de las construcciones más admirables del barroco de la Nueva España. Por donde quiera existen retablos, pequeñas capillas, arte religioso de gran belleza, centros culturales y museos. Además, como telón de fondo, la impresionante Sierra Madre Occidental, rodeando la ciudad.

El zócalo de Oaxaca, también es conocido como Plaza de la Consittución y existe desde tiempos coloniales. En su espacio se levantan antiguas construcciones, muchas de ellas con portales en donde se han instalado comercios y cafeterías. Al sur de este sitio se encuentran los pintorescos mercados 20 de Noviembre y Benito Juárez, los cuales son de obligada visita.

La Ruta de los Dioses es una invitación a conocer varios Estados de nuestro país, que le están esperando para atenderlo como saben hacerlo los mexicanos, con una gran hospitalidad y orgullo por sus raíces.

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