Existe una infinidad de disciplinas deportivas distintas, pero hay una que reina por encima del resto: el fútbol. En México, el escenario va en la línea de esta afirmación, ya que se trata también del deporte más popular entre su población. Un 58% del total de mexicanos encuestados afirma que prefiere consumir o practicar fútbol por encima de otra disciplina. El concepto “consumir” es relevante, ya que esto implica que los equipos del país representan a muchísimos aficionados, lo que demanda dos cosas: un fútbol profesional homologable al de otras ligas mundiales, e infraestructuras de primer nivel.
Los estadios mexicanos son espectaculares, cuatro de ellos superan los 40.000 espectadores, y son obras maestras de la ingeniería deportiva moderna. Seguidamente, repasaremos tres de estos recintos futbolísticos donde cada fin de semana se reúnen miles de personas.
El Estadio Azteca no es solo el estadio más grande México, sino que también es uno de los templos futbolísticos más importantes del panorama mundial. Cuando el Cruz Azul o el América disputan sus partidos como local, los equipos parten con ventaja. Un hecho que queda refrendado en sus estadísticas en la competición nacional y también en las predicciones de sus duelos, cuyas cuotas pueden comprobarse en el portal Betway Sports. En el caso concreto del América, dispone de un momio de 1,95 para su próximo duelo, a diferencia de los 4 que atesora el Atlas de Guadalajara (consultado a fecha de 21 de enero).
El estadio dispone de una capacidad total de 87.000 espectadores, una cifra que le sitúa entre los 10 estadios con más asientos del mundo. Fue inaugurado hace 55 años, en un ya lejano 29 de mayo de 1966. El partido inaugural lo disputaron el América -campeón mexicano de la temporada 65/66- y el Torino italiano. Arlindo dos Santos tiene el honor de ser el primer futbolista en perforar sus redes. El partido finalizó con un empate a 2 goles.
El Azteca ha sufrido diversas remodelaciones que lo han adaptado progresivamente a los tiempos modernos. La más reciente tuvo lugar en 2020, ya que el estadio será una de las sedes del próximo Mundial de Fútbol del año 2026. Una competición que llevará a las mejores selecciones del mundo a los estadios de México, Canadá y Estados Unidos de América. La cancha recibe su nombre por el pasado histórico de la región, muy influenciado por la civilización Azteca, cuyo calendario es uno de los elementos más conocidos.
El segundo estadio con mayor capacidad del país es el Estadio Olímpico Universitario, recinto que dispone de una capacidad para 72.000 espectadores. Se encuentra edificado en la Ciudad de México, misma urbe en la que se puede visitar también el recientemente descrito Estadio Azteca. Una capital con una infinidad de propuestas propuestas arquitectónicas y también gastronómicas.
El Olímpico es un recinto adaptado también a las diversas disciplinas olímpicas, siendo su equipo local el Pumas de la UNAM. Se conoce popularmente con el nombre Estadio México 68, ya que allí se disputaron muchas competiciones relativas a los Juegos Olímpicos de ese año. También fue la sede de diversos partidos relativos al Mundial 86: tres duelos de la primera fase y uno de octavos. Concretamente fue un partido que enfrentó a Francia e Italia el 17 de junio de 1986. El choque finalizó por dos goles a cero a favor del combinado francés.
Por último, el tercer templo en discordia es el Estadio Jalisco, construido en la ciudad de Guadalajara. Cuenta con una capacidad total de 56.713 espectadores, y es el feudo donde el Atlas FC disputa sus duelos.
El partido inaugural tuvo lugar hace 61 años: el 31 de enero de 1960, y los dos equipos que pisaron el césped por primera vez fueron San Lorenzo de Almagro y el Atlas de Guadalajara. El primer gol del estadio tuvo la rúbrica del argentino Norberto Boggio, jugador del equipo visitante. Un futbolista muy querido en el país. El partido finalizó por 0 goles a 2 a favor de los azulgranas.
El estadio también tuvo el honor de albergar competiciones de relevancia mundial, como fueron los Juegos Olímpicos de México 68 o las dos Copas Mundiales de la FIFA de 1970 y 1986. El último torneo internacional de relevancia disputado en el Jalisco fue la Copa Confederaciones del año 1999, torneo que ganó la Selección Mexicana ante Brasil por 4 goles a 3.